sábado, 26 de septiembre de 2009

En el Nombre de tu Nombre



En el nombre de tu nombre
erigiré estandartes en mi piel,
flamearán sobre mí tus banderas,
demarcando pertenencia,
y laceraré mis rodillas al adorarte.

Flamígeros terratenientes,
circunscribiremos a nuestros cuerpos,
los límites de la pasión que nos esclaviza.
Pasión que no logra arrumbarse
postrada ante los altares
de esa humanidad que nos repudia,
convirtiéndonos en víctimas propicias.

Ofrendaré mi sangre
a este delirio que me impulsa a adorar
a los dioses que en nombre del amor,
desafían la vacuidad
que las reglas imponen.

Soy la tierra que convertiste
en tu tierra
Soy el bastión que transformarte
en fuero propio,
impía conversa a la religión
de tus deseos,

En el nombre de tu nombre,
me desangro
En el nombre de tu nombre,
abandono honor, preceptos, credos,
y, en tu nombre,
acepto tu estigma sobre mi cuerpo.


María Magdalena Gabetta



Pintura del Álbum Personal de la Pintora Argentina Marta Álvarez




jueves, 24 de septiembre de 2009

Noche de Tangos y Charcos


Reflejos de la luna
sobre los charcos,
duerme Buenos Aires
acunada en tangos.

Tango sensual y palpitante,
que se apodera de la noche
filtrándose en los conventillos,
arma letal que atraviesa
el pecho de los solitarios.

Las calles empedradas
se tornan brillantes
un guapo en la esquina
fuma somnoliento.

Noche de burdeles.
Noche de amantes.
La luna se eleva
sobre Buenos Aires,
se baja del cielo,
se esconde traviesa
en aceitosos charcos,
o flota en los aljibes
de los viejos patios.

Por las calles repiquetea
el sensual sonido de unos tacos altos.
La luna se multiplica,
en miles de charcos.

En la esquina el guapo
tira la colilla,
acomoda el funyi
un tanto ladeado,
se acerca la turra,
invita al malevo,
se enciende el deseo,
se acuerdan los precios

Reflejos de luna.
Aroma de barrio.
Palpita Buenos Aires
de guapos y putas
su noche de tango.

María Magdalena

Pintura: “Tango Argentino” de la pintora Argentina, Malena Curchi

lunes, 21 de septiembre de 2009

Inspiración (Condena)




Me oprime el aislamiento
al que me condenas sin piedad,
mientras me miras desde tu sitial
despiadada inspiración que me amarras
a tus versátiles vaivenes,
atrapándome en un círculo
del que solamente tú,
posees la llave que libera.

Gozas de mi pequeñez
mientras golpeo contra los muros
de las palabras que me cercan,
aprisionada por el deseo de escribir,
cegada ante el contoneo de las letras,
que danzan cual insinuantes Salomés,
ofreciendo mi cabeza a la estupidez
que me arrebata y me silencia.

Como prisionera de tu torre de Babel,
engrillada a la impericia,
me retraigo atormentada
por el fluir de imágenes y sonidos,
que escapan a mi discernimiento
y grito reclamando compasión,
suplicando me liberes,
rogando abras el círculo
para que mi imaginación termine
con tan cruenta condena,
recobrando intacto y libre,
el mágico sentido de las letras.


María Magdalena Gabetta
Pintura: "Concentración - Dispersión" de la Pintora Riotercerense, Raquel Piedrabuena

sábado, 19 de septiembre de 2009

Río de Otoño


(del libro "Viaje Inesperado")


Duermo en la ribera de este río
con mi cabellera flotando sobre sus aguas.
Robo estrellas al cielo con mi mirada,
que prendo de mis pupilas,
luciérnagas prestadas,
mientras me mece el silencio de la noche.

Imagino cascadas de colores,
tonalidades vírgenes de esta naturaleza
que me supera y me abraza
como una nodriza amante.

Cuando despierto,
desde un viejo árbol
un panal de abejas me regala
un desayuno de dulzuras
y entre mis labios la miel corre
buscando el sendero de mi boca.

Sacudo mi nostalgia
de sombras largas
y recito mi fábula de ríos mansos,
de manos acariciando tornasoladas aguas,
mientras me arrebata insolente
el soplo dorado de abril,
preludio del otoño.

Por un instante,
transito de mujer a pez,
mi piel se convierte en escamas,
y mis escamas se vuelven del color de las hojas.

Giro ágil y certera entre los remolinos,
nado contra la corriente,
remonto el cauce que baja de los cerros,
y agonizo cuando el sol
se esconde lánguido en el ocaso.

María Magdalena Gabetta



Pintura: "Otoño en el Delta", del Pintor Argentino, Martín Carrique